Introducción
Colosenses 1:15–23: La lectura para hoy incluye una descripción de la persona y la obra de Cristo y concluye con la exhortación de Pablo a permanecer fieles.
Versículo bíblico para hoy: Colosenses 1:15
Cristo es la imagen visible de Dios, que es invisible; es su Hijo primogénito, anterior a todo lo creado.
Lectura
15 Cristo es la imagen visible de Dios, que es invisible; es su Hijo primogénito, anterior a todo lo creado. 16 En él Dios creó todo lo que hay en el cielo y en la tierra, tanto lo visible como lo invisible, así como los seres espirituales que tienen dominio, autoridad y poder. Todo fue creado por medio de él y para él. 17 Cristo existe antes que todas las cosas, y por él se mantiene todo en orden. 18 Además, Cristo es la cabeza de la iglesia, que es su cuerpo. Él, que es el principio, fue el primero en resucitar, para tener así el primer puesto en todo. 19 Pues en Cristo quiso residir todo el poder divino, 20 y por medio de él Dios reconcilió a todo el universo ordenándolo hacia él, tanto lo que está en la tierra como lo que está en el cielo, haciendo la paz mediante la sangre que Cristo derramó en la cruz.
21 Ustedes antes eran extranjeros y enemigos de Dios en sus corazones, por las cosas malas que hacían, 22 pero ahora Cristo los ha reconciliado mediante la muerte que sufrió en su existencia terrena. Y lo hizo para tenerlos a ustedes en su presencia, santos, sin mancha y sin culpa. 23 Pero para esto deben permanecer firmemente basados en la fe, sin apartarse de la esperanza que tienen por el mensaje del evangelio que oyeron. Éste es el mensaje que se ha anunciado en todas partes del mundo, y que yo, Pablo, ayudo a predicar.
Reflexiona
Los versículos 15–20 probablemente provienen de un himno cristiano primitivo. ¿Qué dicen estos versículos sobre Jesús? (sería bueno que compares los versículos 15 y 16 con Juan 1:1–3). Según el versículo 22, ¿qué ha hecho Dios? ¿Qué les dice Pablo a los colosenses que hagan (versículo 23)? ¿Cómo habla este versículo a tus circunstancias hoy?
Ora
Señor Dios, te doy gracias y te alabo porque me hiciste tu amigo y me trajiste a tu presencia. Ayúdame a permanecer fiel a tus enseñanzas y a mantenerme firme en la esperanza. Guíame cada día por el camino de tu verdad. Amén.
Lectura para mañana
Colosenses 1:24–29: Pablo describe su obra como siervo del evangelio.