Introducción
Apocalipsis 3:1–22: En este capítulo leemos los mensajes que se escribieron a las iglesias de Sardis, Filadelfia y Laodicea. La iglesia en Filadelfia es elogiada por ser fiel.
Versículo bíblico para hoy: Apocalipsis 3:21
«A los que salgan vencedores les daré un lugar conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono.»
Lectura
3 »Escribe también al ángel de la iglesia de Sardes: “Esto dice el que tiene los siete espíritus de Dios y las siete estrellas: Yo sé todo lo que haces, y sé que estás muerto aunque tienes fama de estar vivo. 2 Despiértate y refuerza las cosas que todavía quedan, pero que ya están a punto de morir, pues he visto que lo que haces no es perfecto delante de mi Dios. 3 Recuerda, pues, la enseñanza que has recibido; síguela y vuélvete a Dios. Si no te mantienes despierto, iré a ti como el ladrón, cuando menos lo esperes. 4 Sin embargo, ahí en Sardes tienes unas cuantas personas que no han manchado sus ropas; ellas andarán conmigo vestidas de blanco, porque se lo merecen. 5 Los que salgan vencedores serán así vestidos de blanco, y no borraré sus nombres del libro de la vida, sino que los reconoceré delante de mi Padre y delante de sus ángeles. 6 ¡El que tiene oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias!”
7 »Escribe también al ángel de la iglesia de Filadelfia: “Esto dice el que es santo y verdadero, el que tiene la llave del rey David, el que cuando abre nadie puede cerrar y cuando cierra nadie puede abrir: 8 Yo sé todo lo que haces; mira, delante de ti he puesto una puerta abierta que nadie puede cerrar, y aunque tienes poca fuerza, has hecho caso de mi palabra y no me has negado. 9 Yo haré que los de la congregación de Satanás, los mentirosos que dicen ser judíos y no lo son, vayan a arrodillarse a tus pies, para que sepan que yo te he amado. 10 Has cumplido mi mandamiento de ser constante, y por eso yo te protegeré de la hora de prueba que va a venir sobre el mundo entero para poner a prueba a todos los que viven en la tierra. 11 Vengo pronto. Conserva lo que tienes, para que nadie te arrebate tu premio. 12 A los que salgan vencedores les daré que sean columnas en el templo de mi Dios, y nunca más saldrán de allí; y en ellos escribiré el nombre de mi Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén que viene del cielo, de mi Dios; y también escribiré en ellos mi nombre nuevo. 13 ¡El que tiene oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias!”
14 »Escribe también al ángel de la iglesia de Laodicea: “Esto dice el Amén, el testigo fiel y verdadero, el origen de todo lo que Dios creó: 15 Yo sé todo lo que haces. Sé que no eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! 16 Pero como eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. 17 Pues tú dices que eres rico, que te ha ido muy bien y que no te hace falta nada; y no te das cuenta de que eres un desdichado, miserable, pobre, ciego y desnudo. 18 Por eso te aconsejo que de mí compres oro refinado en el fuego, para que seas realmente rico; y que de mí compres ropa blanca para vestirte y cubrir tu vergonzosa desnudez, y una medicina para que te la pongas en los ojos y veas. 19 Yo reprendo y corrijo a todos los que amo. Por lo tanto, sé fervoroso y vuélvete a Dios. 20 Mira, yo estoy llamando a la puerta; si alguien oye mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaremos juntos. 21 A los que salgan vencedores les daré un lugar conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono. 22 ¡El que tiene oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias!”»
Reflexiona
¿Cómo se describe a Jesús a cada una de las tres iglesias mencionadas en la lectura para hoy? Al igual que las cuatro iglesias de la lectura de ayer, también se les dice a estas tres que el Señor sabe lo que están haciendo o lo que han hecho. ¿Cómo habrían reaccionado las iglesias al escuchar esas palabras? ¿Qué dice Jesús que hace con aquellos a quienes ama (versículos 19–20)?
Ora
Señor Dios, tu conocimiento de mí está más allá de mi comprensión. Nada de mí está oculto para ti. Y, aun así, me amas y quieres entrar en mí. Ayúdame a permanecer fiel y a ser verdadero a tu palabra. Amén.
Lectura para mañana
Apocalipsis 4:1–11: Juan describe una visión de adoración en el cielo.