La salvadora Palabra de Dios: Amor
Introducción
Salmos 51: La lectura para hoy es un salmo pidiendo el perdón de Dios, y es atribuido al rey David. Después de que David arregló para que Urías fuera muerto en batalla, a fin de casarse con Betsabé, que ya estaba embarazada con un hijo de David, el profeta Natán confrontó a David con su pecado (véase 2 Samuel 11:1—12:15).
Lectura para hoy
Oh Dios, ten compasión de mí
(1) Del maestro de coro. Salmo de David, (2) después que el profeta Natán lo reprendió por haber cometido adulterio con Betsabé.
51 (3) Por tu amor, oh Dios, ten compasión de mí;
por tu gran ternura, borra mis culpas.
2 (4) ¡Lávame de mi maldad!
¡Límpiame de mi pecado!
3 (5) Reconozco que he sido rebelde;
mi pecado no se borra de mi mente.
4 (6) Contra ti he pecado, y sólo contra ti,
haciendo lo malo, lo que tú condenas.
Por eso tu sentencia es justa;
irreprochable tu juicio.
5 (7) En verdad, soy malo desde que nací;
soy pecador desde el seno de mi madre.
6 (8) En verdad, tú amas al corazón sincero,
y en lo íntimo me has dado sabiduría.
7 (9) Purifícame con hisopo, y quedaré limpio;
lávame, y quedaré más blanco que la nieve.
8 (10) Lléname de gozo y alegría;
alégrame de nuevo, aunque me has quebrantado.
9 (11) Aleja de tu vista mis pecados
y borra todas mis maldades.
10 (12) Oh Dios, ¡pon en mí un corazón limpio!,
¡dame un espíritu nuevo y fiel!
11 (13) No me apartes de tu presencia
ni me quites tu santo espíritu.
12 (14) Hazme sentir de nuevo el gozo de tu salvación;
sosténme con tu espíritu generoso,
13 (15) para que yo enseñe a los rebeldes tus caminos
y los pecadores se vuelvan a ti.
14 (16) Líbrame de cometer homicidios,
oh Dios, Dios de mi salvación,
y anunciaré con cantos que tú eres justo.
15 (17) Señor, abre mis labios,
y con mis labios te cantaré alabanzas.
16 (18) Pues tú no quieres ofrendas ni holocaustos;
yo te los daría, pero no es lo que te agrada.
17 (19) Las ofrendas a Dios son un espíritu dolido;
¡tú no desprecias, oh Dios, un corazón hecho pedazos!
18 (20) Haz bien a Sión, por tu buena voluntad;
vuelve a levantar los muros de Jerusalén.
19 (21) Entonces aceptarás los sacrificios requeridos,
las ofrendas y los holocaustos;
entonces se ofrecerán becerros sobre tu altar.
Texto clave para hoy: Salmos 51:1
Por tu amor, oh Dios, ten compasión de mí; por tu gran ternura, borra mis culpas
Reflexiona
¿Cómo describirías el tono de la oración de David? ¿Qué es lo que confiesa? ¿Qué le pide a Dios? ¿De qué manera esta oración podría servir como modelo de confesión para ti? ¿Qué necesitas confesar a Dios hoy?
Ora
Ten misericordia de mí, oh Dios, por tu amor constante, y borra todos mis pecados. Crea en mí un corazón puro y pon en mí un espíritu nuevo y fiel. Mantenme siempre en tu presencia a fin de que pueda conocer el gozo que viene de ti y de tu salvación. Enséñame a obedecerte. Oro en tu santo nombre. Amén.
Y ahora, unámonos en oración por las muchas viudas en India que están batallando con la turbulencia emocional de perder a sus esposos. Dios de gracia, las viudas en India están experimentando dolor, que está compuesto de soledad y rechazo social. Pero gracias al sostén de los socios de Una Biblia al Mes al ayudar a esas mujeres para que puedan adquirir sus propias Biblias, ellas están encontrando sanidad y fortaleza en tu Palabra al reunirse para consolarse unas a otras y leer las Escrituras juntas. Amén.
Lectura para mañana
Salmos 52: Un salmo de juicio de la gracia de Dios.