¿Recuerdas la primera vez que pusieron a ese bebé en tus brazos? ¿Puedes recordar el olor de su piel y la sensación incomparable de sus pequeños dedos alrededor de los tuyos? ¿Recuerdas los sueños que tuviste para ella o los planes que tuviste para él?

Seguramente recuerdas cómo crecieron … esa primera risita, esos primeros pasos, el primer día en el jardín de infantes, la primera cita. ¡Estos son tiempos llenos de esperanza!

Sin embargo, como padre, es difícil ignorar el mundo aterrador en el que vivimos. Las noticias están llenas de historias de violencia y terror. Nuestros hijos enfrentan la tentación como ninguna otra generación, y es tan difícil saber que no podemos protegerlos de los problemas de la vida. Sin embargo, podemos ser proactivos guardando sus mentes, cuerpos y espíritus en oración.

A continuación hay algunos versículos que te guiarán mientras oras:

  1. Señor, protégelos. 

    Pues te cubrirá con sus alas, y bajo ellas estarás seguro. ¡Su fidelidad te protegerá como un escudo! – Salmos 91:4

  2. Señor, dales sabiduría. 

    Por lo tanto, cuiden mucho su comportamiento. No vivan neciamente, sino con sabiduría. Aprovechen bien este momento decisivo, porque los días son malos. No actúen tontamente; procuren entender cuál es la voluntad del Señor. – Efesios 5:15–17

  3. Señor, ayúdalos a resistir la tentación. 

    Ustedes no han pasado por ninguna prueba que no sea humanamente soportable. Y pueden ustedes confiar en Dios, que no los dejará sufrir pruebas más duras de lo que pueden soportar. Por el contrario, cuando llegue la prueba, Dios les dará también la manera de salir de ella, para que puedan soportarla. – 1 Corintios 10:13

  4. Señor, guíalos 

    Por esto nosotros, desde el día que lo supimos, no hemos dejado de orar por ustedes y de pedir a Dios que los haga conocer plenamente su voluntad y les dé toda clase de sabiduría y entendimiento espiritual. Así podrán portarse como deben hacerlo los que son del Señor, haciendo siempre lo que a él le agrada, dando frutos de toda clase de buenas obras y creciendo en el conocimiento de Dios. – Colosenses 1:9–10

  5. Señor, dales el deseo de conocerte más. 

    Oh Señor, enséñame tu camino, para que yo lo siga fielmente. Haz que mi corazón honre tu nombre. – Salmos 86:11

Originalmente publicado en inglés en el Bible Blog de American Bible Society el 15 de enero de 2015.