Introducción
1 Juan 3:1–10: Los hijos de Dios son llamados así debido al gran amor de Dios por ellos. Aquellos que hacen lo que es justo son justos, mientras que aquellos que continúan pecando pertenecen al diablo. A los hijos de Dios se les manda amarse unos a otros y creer en el Hijo de Dios, Jesús.
Versículo bíblico para hoy: 1 Juan 3:1a
Miren cuánto nos ama Dios el Padre, que se nos puede llamar hijos de Dios, y lo somos.
Lectura
3 Miren cuánto nos ama Dios el Padre, que se nos puede llamar hijos de Dios, y lo somos. Por eso, los que son del mundo no nos conocen, pues no han conocido a Dios. 2 Queridos hermanos, ya somos hijos de Dios. Y aunque no se ve todavía lo que seremos después, sabemos que cuando Jesucristo aparezca seremos como él, porque lo veremos tal como es. 3 Y todo el que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, de la misma manera que Jesucristo es puro.
4 Pero todo el que peca, hace maldad; porque el pecado es la maldad. 5 Ustedes ya saben que Jesucristo vino al mundo para quitar los pecados, y que él no tiene pecado alguno. 6 Así pues, todo el que permanece unido a él, no sigue pecando; pero todo el que peca, no lo ha visto ni lo ha conocido. 7 Hijitos míos, que nadie los engañe: el que practica la justicia es justo, como él es justo; 8 pero el que practica el pecado es del diablo, porque el diablo peca desde el principio. Precisamente para esto ha venido el Hijo de Dios: para deshacer lo hecho por el diablo.
9 Ninguno que sea hijo de Dios practica el pecado, porque tiene en sí mismo el germen de la vida de Dios; y no puede seguir pecando porque es hijo de Dios. 10 Se sabe quiénes son hijos de Dios y quiénes son hijos del diablo, porque cualquiera que no hace el bien o no ama a su hermano, no es de Dios.
Reflexiona
Según los versículos 7-10, ¿qué distingue a los hijos de Dios de los hijos del diablo? ¿De qué maneras demuestras que eres hijo de Dios?
Ora
Señor Dios, gracias por amarme y llamarme a ser tu hijo. En mi camino de fe, guíame cada día por un camino justo mientras deposito mi confianza en ti. Oro en tu santo nombre. Amén.
Lectura para mañana
1 Juan 3:11–24: El amor verdadero se muestra en acción.