Introducción
2 Samuel 22:31–51: La lectura para hoy es una continuación de la oración de victoria de David. David dice que los caminos de Dios son perfectos y que sus palabras son confiables. Luego describe sus batallas con sus enemigos y las maneras en que Dios lo salvó. Su oración concluye con palabras de alabanza y acción de gracias por el amor constante de Dios.
Versículo bíblico para hoy: 2 Samuel 22:33
Dios es mi refugio poderoso, quien hace intachable mi conducta.
Lectura
31 »El camino de Dios es perfecto;
la promesa del Señor es digna de confianza.
¡Dios protege a todos los que en él confían!
32 ¿Quién es Dios, fuera del Señor?
¿Qué otro dios hay que pueda protegernos?
33 Dios es mi refugio poderoso,
quien hace intachable mi conducta,
34 quien me da pies ligeros, como de ciervo,
quien me hace estar firme en las alturas,
35 quien me entrena para la batalla,
quien me da fuerzas para tensar arcos de bronce.
36 »Tú me proteges y me salvas;
tu bondad me ha hecho prosperar.
37 Has hecho fácil mi camino,
y mis pies no han resbalado.
38 »Perseguí a mis enemigos, los destruí,
y sólo volví después de exterminarlos.
39 ¡Los exterminé! ¡Los hice pedazos!
Ya no se levantaron: ¡cayeron debajo de mis pies!
40 Tú me diste fuerza en la batalla;
hiciste que los rebeldes se inclinaran ante mí,
41 y que delante de mi huyeran mis enemigos.
Así pude destruir a los que me odiaban.
42 Pedían ayuda, y nadie los ayudó;
llamaban al Señor, y no les contestó.
43 ¡Los deshice como a polvo del suelo!
¡Los pisoteé como a barro de las calles!
44 Me libraste de las luchas de mi pueblo,
me mantuviste como jefe de las naciones,
y me sirve gente que yo no conocía.
45 En cuanto me oyen, me obedecen;
gente extranjera me halaga,
46 gente extranjera se acobarda
y sale temblando de sus refugios.
47 »¡Viva el Señor! ¡Bendito sea mi protector!
¡Sea enaltecido Dios, que me salva y me protege!
48 Él es el Dios que me ha vengado
y que me ha sometido los pueblos.
49 Él me libra de mis enemigos,
de los rebeldes que se alzaron contra mí.
¡Tú, Señor, me salvas de los hombres violentos!
50 Por eso te alabo entre las naciones
y canto himnos a tu nombre.
51 Concedes grandes victorias al rey que has escogido;
siempre tratas con amor a David y a su descendencia.»
Reflexiona
¿Cuáles son las maneras en que David experimentó la protección de Dios? ¿Alguna vez has sentido la protección de Dios? Si es así, ¿cómo fue esa experiencia? ¿Cómo alabarás a Dios hoy?
Ora
Tú, Señor Dios, eres mi refugio fuerte. Gracias por tu protección y amor constante. Te alabaré y honraré todos mis días. Amén.
Lectura para mañana
1 Reyes 2:1–12: Salomón sucede a David como rey.