18 de julio

Introducción

Ezequiel 33:1–20: al recordar a Ezequiel de su designación para servir como centinela o vigía para Israel (véase Ezequiel 3:16–21), Dios le dice al profeta que su rol es transmitir al pueblo cualquier advertencia que Dios le da.

Versículo bíblico para hoy: Ezequiel 33:19

[El Señor dijo:] “Y si el malvado deja de hacer lo malo y hace lo bueno y lo justo, a causa de ello vivirá.”

Lectura

33 El Señor se dirigió a mí, y me dijo: «Tú, hombre, habla a tus compatriotas, y diles: “Cuando yo envío la guerra a un país, la gente de ese país escoge a uno de ellos para ponerlo de centinela. Y cuando el centinela ve que los ejércitos enemigos se acercan al país, toca la trompeta y previene a la gente. Si alguien escucha el toque de trompeta y no le hace caso, y los enemigos llegan y lo matan, el culpable de su muerte es él mismo, porque oyó el toque de trompeta pero no hizo caso; es culpable de su muerte, porque, si hubiera hecho caso, habría salvado su vida. Pero si el centinela ve llegar los ejércitos enemigos y no toca la trompeta para prevenir a la gente, y los enemigos llegan y matan a alguien, éste morirá por su pecado, pero yo le pediré al centinela cuentas de esa muerte.”

»Pues a ti, hombre, yo te he puesto como centinela del pueblo de Israel. Tú deberás recibir mis mensajes y comunicarles mis advertencias. Puede darse el caso de que yo pronuncie sentencia de muerte contra un malvado; pues bien, si tú no hablas con él para advertirle que cambie de vida, y él no lo hace, ese malvado morirá por su pecado, pero yo te pediré a ti cuentas de su muerte. Si tú, en cambio, adviertes al malvado que cambie de vida, y él no lo hace, él morirá por su pecado, pero tú salvarás tu vida.

10 »Tú, hombre, di al pueblo de Israel: “Ustedes dicen: Estamos cargados de faltas y pecados. Por eso nos estamos pudriendo en vida. ¿Cómo podremos vivir? 11 Pero yo, el Señor, juro por mi vida que no quiero la muerte del malvado, sino que cambie de conducta y viva. Israel, deja esa mala vida que llevas. ¿Por qué habrás de morir?”

12 »Tú, hombre, di a tus compatriotas: “Si un hombre bueno peca, su bondad anterior no lo salvará, y si un malvado deja de hacer el mal, su maldad anterior no será causa de su muerte. Si el hombre bueno peca, su bondad anterior no le valdrá para seguir viviendo. 13 Si yo le prometo vida a un hombre bueno, y éste, ateniéndose a su bondad, hace el mal, no tomaré en cuenta ninguna buena acción suya, sino que morirá por el mal que haya cometido. 14 Y si condeno a morir a un malvado, y este deja el pecado y actúa bien y con justicia, 15 y devuelve lo que había recibido en prenda o lo que había robado, y cumple las leyes que dan la vida y deja de hacer lo malo, ciertamente vivirá y no morirá. 16 Puesto que ahora actúa bien y con justicia, vivirá, y no me acordaré de ninguno de los pecados que había cometido.” 17 Tus compatriotas dirán que yo no actúo con justicia; pero en realidad son ellos los que no actúan con justicia. 18 Si el hombre bueno deja de hacer lo bueno y hace lo malo, morirá a causa de ello. 19 Y si el malvado deja de hacer lo malo y hace lo bueno y lo justo, a causa de ello vivirá. 20 Ustedes repiten: “El Señor no está actuando con justicia.” Pero yo juzgaré a cada uno de ustedes, israelitas, de acuerdo con sus acciones.»

Reflexiona

¿Qué instrucciones recibe Ezequiel de Dios (versículos 7–9)? Según el versículo 11, ¿qué quiere Dios? ¿Qué dice eso sobre el carácter de Dios? Lee otra vez los versículos 12–20. ¿Qué piensas sobre lo que Dios dice respecto a quienes son considerados «buenos» y de quienes son considerados «malvados»?

Ora

Soberano Dios, mantenme lejos de pecar a fin de que todo lo que diga y haga sea agradable a tus ojos. Ayúdame cada día a hacer lo que es correcto. Tus enseñanzas y tu ley dan vida, y busco servirte de acuerdo a tu voluntad. Amén.

Lectura para mañana

Ezequiel 36:1–15: Dios promete restaurar a Israel.