7 de julio
Introducción
Jeremías 3:6–18: se describe la infidelidad de Israel y Judá. A ambas naciones se les dice que se arrepientan y vuelvan al Señor.
Versículo bíblico para hoy: Jeremías 3:12b
El Señor afirma: “¡Vuelve a mí, rebelde Israel! No te recibiré de mal modo ni mantendré mi enojo por siempre.”
Lectura
6 En tiempos del rey Josías me dijo el Señor: «¿Has visto lo que hizo la rebelde Israel? Fue y se dedicó a la prostitución sobre toda loma alta y bajo todo árbol frondoso. 7 Yo pensé que, aun después de todo lo que ella había hecho, volvería a mí; pero no volvió. Su hermana, la infiel Judá, vio esto; 8 y vio también que yo repudié a la rebelde Israel y que me divorcié de ella precisamente por el adulterio cometido. Pero Judá, la infiel hermana de Israel, no tuvo temor, sino que también ella fue y se dedicó a la prostitución. 9 Y lo hizo con tanta facilidad, que profanó el país. Me fue infiel adorando a las piedras y a los árboles. 10 Y después de todo esto, la infiel Judá tampoco volvió a mí de todo corazón, sino que me engañó. Yo, el Señor, lo afirmo.»
11 El Señor me dijo: «La rebelde Israel es menos culpable que la infiel Judá. 12 Ve y anuncia este mensaje mirando hacia el norte:
»“El Señor afirma:
¡Vuelve a mí, rebelde Israel!
No te recibiré de mal modo
ni mantendré mi enojo por siempre,
porque soy bondadoso.
Yo, el Señor, doy mi palabra.
13 Reconoce tan sólo tu maldad,
y que fuiste rebelde contra el Señor tu Dios;
que corriste en busca de amores extraños
debajo de todo árbol frondoso,
y que no obedeciste mis órdenes.
Yo, el Señor, lo afirmo.”»
14 El Señor afirma: «Regresen, hijos rebeldes, pues yo soy su dueño. Tomaré uno de cada ciudad y dos de cada clan, y los haré volver a Sión. 15 Les daré los gobernantes que a mí me agradan, y ellos los gobernarán a ustedes con sabiduría y entendimiento. 16 Y cuando ustedes hayan aumentado en el país y tengan ya muchos hijos, nadie volverá a hablar más del arca de la alianza del Señor; nadie pensará en ella ni se acordará más de ella; ya no hará falta ni se hará una nueva. Yo, el Señor, doy mi palabra. 17 Jerusalén será llamada entonces el trono del Señor; todas las naciones se reunirán allí para honrarme, y no volverán a seguir tercamente las malas inclinaciones de su corazón.
18 »Cuando llegue ese día, Judá se unirá a Israel, y juntos regresarán del país del norte a la tierra que di como herencia a los antepasados de ustedes.
Reflexiona
Lee nuevamente los versículos 6–10. ¿Cómo se describe a Israel y Judá? ¿Qué se le dijo a Jeremías que dijera (versículos 11–13)? ¿Qué promete Dios a cambio de la confesión del pueblo (versículos 14–18)? ¿Qué necesitas confesar a Dios hoy?
Ora
Dios amoroso y misericordioso, te confieso __________________. Gracias por tu constante fidelidad, por perdonarme y restaurarme a una correcta relación contigo. Amén.
Lectura para mañana
Jeremías 4:1–4: el Señor hace un llamado al arrepentimiento.