La Palabra de Dios que guía: oración
Introducción
Salmos 28: La lectura para hoy comienza con una súplica de ayuda de Dios y concluye con palabras de agradecimiento y alabanza.
Versículo clave para hoy: Salmos 28:6
¡Bendito sea el Señor, que ha escuchado mis ruegos!
Lectura para hoy
(1a) De David.
28 (1b) Señor, mi protector,
a ti clamo.
¡No te niegues a responderme!
Pues si te niegas a responderme,
ya puedo contarme entre los muertos.
2 Oye mis gritos cuando te pido ayuda,
cuando extiendo mis manos hacia tu santo templo.
3 No me arrastres junto con los malvados,
no me hagas correr la suerte de los malhechores,
que por fuera se muestran amistosos
pero por dentro son todo maldad.
4 Dales su merecido,
conforme a sus malas acciones;
págales con la misma moneda,
conforme al mal que han cometido.
5 Ya que no tienen presentes
las cosas que hizo el Señor,
¡que él los destruya y no los vuelva a levantar!
6 ¡Bendito sea el Señor, que ha escuchado mis ruegos!
7 El Señor es mi poderoso protector;
en él confié plenamente, y él me ayudó.
Mi corazón está alegre;
cantaré y daré gracias al Señor.
8 El Señor es la fuerza de su pueblo;
es ayuda y refugio de su rey escogido.
9 Salva a tu pueblo, Señor;
bendice a los tuyos.
Cuídalos como un pastor;
¡llévalos en tus brazos para siempre!
Reflexiona
Los versículos 1-5 reflejan el lamento de un individuo; los versículos 6-9 reflejan la canción de alabanza de un individuo. ¿Cómo describirías los sentimientos del escritor del salmo en estos versículos? ¿Qué lleva al escritor a clamar a Dios? ¿Cómo expresa el escritor su confianza en Dios? ¿Qué piensas sobre el cambio repentino de tono al final del versículo 5 y al comienzo del versículo 6?
Ora
Dios de amor y misericordia, cuidas de tu pueblo como un pastor. Escucha mi clamor y atiende mi oración por _____________________________. Oro en tu santo nombre. Amén.
Lectura para mañana
Salmos 31: Una oración de confianza en Dios.