Introducción

Proverbios 15:1–33: la lectura para hoy comienza con versículos que relatan los beneficios de las respuestas suaves y las palabras amables, y concluye afirmando la importancia de tener reverencia por el Señor.

Versículo bíblico para hoy: Proverbios 15:33

El honrar al Señor instruye en la sabiduría; para recibir honores, primero hay que ser humilde.

Lectura

15 La respuesta amable calma el enojo;
la respuesta violenta lo excita más.

De la lengua de los sabios brota sabiduría;
de la boca de los necios, necedades.

El Señor está en todo lugar
vigilando a los buenos y a los malos.

La lengua amable es un árbol de vida;
la lengua perversa hace daño al espíritu.

El necio desprecia la corrección de su padre;
el que la atiende, demuestra inteligencia.

Gran abundancia hay en casa del hombre honrado,
pero al malvado no le aprovechan sus ganancias.

Los sabios esparcen sabiduría con sus labios;
los necios, con su mente, hacen todo lo contrario.

El Señor no soporta las ofrendas de los malvados,
pero recibe con agrado la oración de los justos.

El Señor no soporta la conducta de los malvados,
pero ama a quien vive una vida recta.

10 Al que deja el buen camino se le corrige con dureza;
el que odia la reprensión, morirá.

11 Si a la vista del Señor están la muerte y el sepulcro,
¡con mayor razón los pensamientos de los hombres!

12 El insolente no ama al que le reprende,
ni busca la compañía de los sabios.

13 Corazón alegre, cara feliz;
corazón enfermo, semblante triste.

14 La mente inteligente busca el saber,
pero los necios se alimentan de necedades.

15 Para quien está afligido, todos los días son malos;
para quien está contento, son una fiesta constante.

16 Más vale ser pobre y honrar al Señor,
que ser rico y vivir angustiado.

17 Más vale comer verduras con amor,
que carne de res con odio.

18 El que es impulsivo provoca peleas;
el que es paciente las apacigua.

19 Para el perezoso, el camino está lleno de espinas;
para el hombre recto, el camino es amplia calzada.

20 El hijo sabio alegra a sus padres;
el hijo necio los menosprecia.

21 El imprudente goza con su necedad;
el inteligente corrige sus propios pasos.

22 Cuando no hay consulta, los planes fracasan;
el éxito depende de los muchos consejeros.

23 ¡Qué grato es hallar la respuesta apropiada,
y aún más cuando es oportuna!

24 El camino de la vida va cuesta arriba,
y libra al sabio de bajar al sepulcro.

25 El Señor destruye la casa del orgulloso,
pero mantiene invariable la propiedad de la viuda.

26 El Señor no soporta los planes malvados,
pero le agradan las palabras sin malicia.

27 El que se da a la codicia arruina su propia casa,
pero el que rechaza el soborno, vivirá.

28 El hombre justo piensa lo que ha de responder,
pero el malvado lanza maldad por la boca.

29 El Señor se aleja de los malvados,
pero atiende a la oración de los justos.

30 Los ojos radiantes alegran el corazón;
las buenas noticias dan nuevas fuerzas.

31 El que atiende a la reprensión que da vida,
tendrá un lugar entre los sabios.

32 El que desprecia la corrección no se aprecia a sí mismo;
el que atiende a la reprensión adquiere entendimiento.

33 El honrar al Señor instruye en la sabiduría;
para recibir honores, primero hay que ser humilde.

Reflexiona

Tener una profunda reverencia o respeto (la mayoría de las traducciones utilizan la palabra «temor») por el Señor es un tema recurrente en el libro de Proverbios (véanse 1:7; 9:10; 14:2, 26, 27; 23:17; 24:21). Proverbios 9:10 dice: «La sabiduría comienza por honrar al Señor; conocer al Santísimo es tener inteligencia». En la lectura para hoy, el versículo 33 dice que la reverencia por el Señor enseña sabiduría. ¿De qué maneras puede el respeto hacia Dios mejorar tu conocimiento y crecimiento en sabiduría?

Ora

Señor Dios, anhelo crecer día a día en tu sabiduría. Quiero conocerte mejor y tener una comprensión más profunda de tus buenos caminos. Enséñame por tu Palabra a vivir de maneras que reflejen reverencia y obediencia hacia ti. Amén.

Lectura para mañana

Proverbios 16:1–33: Dios tiene la última palabra.