Introducción
Salmos 128: La lectura para hoy describe la felicidad y recompensa de aquellos que obedecen a Dios. Incluye una bendición que los sacerdotes otorgaban a los peregrinos que asistían a un festival en Jerusalén. El salmo concluye con una bendición sobre Jerusalén.
Versículo bíblico para hoy: Salmos 128:1
Feliz tú, que honras al Señor y le eres obediente.
Lectura
128 (1b) Feliz tú, que honras al Señor
y le eres obediente.
2 Comerás del fruto de tu trabajo,
serás feliz y te irá bien.
3 En la intimidad de tu hogar,
tu mujer será como una vid cargada de uvas;
tus hijos, alrededor de tu mesa,
serán como retoños de olivo.
4 Así bendecirá el Señor al hombre que lo honra.
5 ¡Que el Señor te bendiga desde el monte Sión!
¡Que veas el bienestar de Jerusalén
todos los días de tu vida!
6 ¡Que llegues a ver a tus nietos!
¡Que haya paz en Israel!
Reflexiona
¿Qué bendiciones se mencionan en este salmo? Vuelve a leer el versículo 1. ¿De qué maneras buscas obedecer al Señor y vivir de acuerdo con sus mandamientos? ¿De qué maneras has experimentado las bendiciones de Dios?
Ora
Dios de amor, ayúdame a obedecerte y a vivir según tus mandamientos. Te agradezco y alabo por tus muchas bendiciones. Guía mis palabras y acciones en este día para que te honre en todo lo que hago y digo. Amén.
Lectura para mañana
1 Crónicas 15:1–24: David se prepara para llevar el Arca de la Alianza a Jerusalén.
