Los libros, en su mayoría, pueden ser clasificados según una categoría particular de la literatura. Por ejemplo, un folleto de instrucciones para hacer algo utiliza un lenguaje técnico. Una novela, sin embargo, utiliza un lenguaje narrativo de ficción. Un libro de poesía utiliza versos que riman o versos libres. Y un libro de historia utiliza a su vez la narración de los hechos. El tipo del libro determina, casi siempre, la clase de literatura utilizada. La Biblia está encuadernada como un gran libro, pero en realidad es una colección de muchos libros, escritos usando diferentes géneros literarios. Esto hace que la Biblia sea al mismo tiempo una lectura que desafía y emociona.

Diferentes géneros literarios en la Biblia

Los libros, en su mayoría, pueden ser clasificados según una categoría particular de la literatura. Por ejemplo, un folleto de instrucciones para hacer algo utiliza un lenguaje técnico. Una novela, sin embargo, utiliza un lenguaje narrativo de ficción. Un libro de poesía utiliza versos que riman o versos libres. Y un libro de historia utiliza a su vez la narración de los hechos. El tipo del libro determina, casi siempre, la clase de literatura utilizada. La Biblia está encuadernada como un gran libro, pero en realidad es una colección de muchos libros, escritos usando diferentes géneros literarios. Esto hace que la Biblia sea al mismo tiempo una lectura que desafía y emociona.

Al estudiar los libros de la Biblia, es importante analizar no solo la información que contiene el libro, sino también la forma literaria que el autor ha utilizado.

La clase de literatura utilizada puede darnos pistas sobre lo que el autor estaba tratando de decir. Por ejemplo, al leer 1 Samuel 1:1-28 y compararlo con 1 Samuel 2:1-10, nos damos cuenta que estos pasajes del mismo libro utilizan dos tipos diferentes de escritura. La primera sección es como prosa o cuento, mientras que la segunda es una oración o una canción en forma de poema. Notar el cambio, de prosa a poesía, puede ayudar al lector a entender mejor el texto.

Un breve ejemplo del Nuevo Testamento es la historia del nacimiento de Jesús. Lucas 2:1-21 habla de los acontecimientos del nacimiento de Jesús y da muchos detalles sobre dicho evento. En contraste, Juan no utiliza una historia para narrar el nacimiento de Jesús, sino que comienza con un poema (1:1-14), que describe a Jesús como «la palabra» y «la luz verdadera» que se hizo «hombre». ¿Cómo influyen estos tipos de literatura en lo que pensamos acerca de Jesús? ¿Por qué cada uno de los escritores de estos Evangelios ha enfatizado distintos aspectos de su nacimiento y de su identidad? Analizar la información que un escritor decide compartir puede ayudarnos a entender de una manera diferente lo que la Biblia dice. La Biblia incluye muchos géneros literarios. Algunos géneros literarios describen un libro completo. En la Biblia, los géneros más importante son: leyes y normas, historia, poesía y canciones, refranes de sabiduría y proverbios, evangelios, cartas y escritos apocalípticos. Otras formas literarias describen secciones dentro de un libro. Dentro de las más importantes resaltan la prosa narrativa, las oraciones, las parábolas, las profecías (oráculos) y las largas listas de familia (genealogías).

Leyes y normas

Muchas culturas del antiguo Oriente Próximo desarrollaron códigos legales. Uno de los más famosos es el código de un líder babilonio llamado Hammurabi, quien murió alrededor del año 1686 a.C. Los primeros cinco libros de las escrituras judías (Antiguo Testamento) conforman la sección conocida como la ley, o la «Torá». No toda la literatura de estos cinco libros incluye leyes, pero sí la mayoría. Estas leyes incluyen tanto leyes que prohíben las cosas («no… ») como leyes que fomentan las cosas («haz… »). Las leyes fueron dadas al pueblo de Israel para que adoraran correctamente a Dios y se trataran mutuamente con respeto y cuidado. La literatura legal más conocida de la Biblia son los diez mandamientos encontrados en Éxodo 20:1-17 y Deuteronomio 5:6-20. Otros ejemplos se encuentran en Números 6:1-21; Números 35:16-34; Santiago 4:11-12.

Historia

En el Antiguo Testamento, los escritos históricos cuentan la narrativa de la historia de Israel desde el establecimiento en Canaán, en el año de 1250 a.C., hasta la caída de Jerusalén, en el año de 587 a.C. Estos libros describen las actividades de figuras tan importantes como los profetas Elías y Eliseo, y los reyes de Israel y Judá, entre ellos el rey David y el rey Salomón. Estos libros también incluyen información sobre los eventos de los dos reinos israelitas después de la separación en el año de 931 a.C. Ejemplos de los libros históricos en el Antiguo Testamento son Josué y 1 y 2 Reyes. En el Nuevo Testamento, los Hechos de los apóstoles cuenta la historia de la iglesia primitiva.

Poesía y canciones

Esta es una categoría amplia que incluye a la vez diferentes formas. La poesía se utiliza especialmente en los Salmos, el libro de Job y el Cantar de los cantares. Pero podemos encontrar poesía en muchos libros de la Biblia. Algunos de los poemas en la Biblia son muestras de canciones o himnos muy antiguos. Muchos de los salmos estaban destinados para la adoración y la oración. Los discursos de los profetas incluyen formas poéticas del lenguaje. No es nada fácil traducir poesía hebrea al español, y a veces técnicas especiales que son eficaces en el idioma original no tienen la mima eficacia cuando la poesía es traducida al español. Una característica importante de la poesía hebrea es la repetición de una misma idea en dos formas similares pero distintas. Esto se llama «paralelismo» y Salmos 22:9,10 es un ejemplo. Podemos encontrar otros ejemplos de la poesía del Antiguo Testamento en Éxodo 15:1-18; Job 22:1-17; Salmo 23; Isaías 5:1-7; Jonás 2:2-9. La poesía también se utiliza en el Nuevo Testamento, como por ejemplo Lucas 1:46-55; Filipenses 2:6-11 y Apocalipsis 15:3,4.

Refranes de sabiduría y Proverbios

Una buena porción del Antiguo Testamento llamada literatura de «Sabiduría y adoración» (sapienciales) incluye poemas, salmos, historias, entre otras formas literarias. Los proverbios y refranes de sabiduría tienen un estilo único, parecen dichos con sentido común y reflexiones sobre el mundo, Dios y el lugar que ocupan los seres humanos. Refranes de sabiduría llenan todo el libro de Proverbios, pero también se encuentran en otros libros. Libros como Eclesiastés y Job ofrecen sabiduría junto con las clases de reflexiones filosóficas mencionadas anteriormente. Los escritos de sabiduría generalmente no dan mucha información directa sobre la historia de Israel; en cambio, formulan preguntas sobre temas morales y preguntas difíciles acerca de la vida. Algunos de estos escritos de sabiduría son atribuidos a Salomón, porque él era conocido como el rey más sabio de Israel, pero fueron escritos probablemente mucho después y se le atribuyen a él como una manera de honrarlo. Además de los libros ya mencionados, Salmos 1 y 37 son buenos ejemplos de literatura sapiencial. Refranes de sabiduría son también una parte importante del Nuevo Testamento. Pueden encontrarse algunos ejemplos en el «Sermón de la montaña» de Jesús y en Santiago 3:2-8; 4:13-17.

Evangelios

Mateo, Marcos, Lucas y Juan son los cuatro libros del Nuevo Testamento que hablan de la vida y las enseñanzas de Jesús. Estos libros se llaman «Evangelios». La palabra «evangelio» viene de la palabra griega euangelion, que significa «buena noticia».

Letras

Muchos libros del Nuevo Testamento son cartas escritas por el apóstol Pablo u otras personas. Estas cartas están escritas en el estilo formal de las cartas griegas del siglo I d.C. En primer lugar, se identifica la persona que escribe la carta (Romanos 1:1-6). Esto es seguido por el nombre de las personas a quien la carta va dirigida y el saludo (Romanos 1:7). La sección más grande de la carta es el «cuerpo» (Romanos 1:16-15:33). En la mayoría de las cartas de Pablo, una oración de acción de gracias sigue el saludo (Romanos 1:8-15) y un saludo final y bendición cierra la carta (Romanos 16:1-27). Dentro de cada carta puede haber diferentes géneros literarios, incluyendo oraciones, instrucciones, enseñanzas, sabiduría, advertencias, himnos o canciones y noticias personales.

Algunos de los escritos del Nuevo Testamento, llamados «cartas», se ocupan de cuestiones más generales que serían de interés para las comunidades cristianas en casi cualquier lugar. La carta a los Hebreos es un ejemplo de esto. Cartas breves dirigidas a las siete iglesias de Asia Menor aparecen en los capítulos 2 y 3 de Apocalipsis. Los libros de la Biblia que son cartas o que están escritos en el estilo de las cartas pueden encontrarse después de Hechos y antes del Apocalipsis.