Reflexiona:
Jesús dijo: «Si alguno quiere ser el primero, deberá ser el esclavo de todos».
Piensa:
El tiempo de cuaresma es un tiempo de preparación para vivir el misterio de la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Durante este tiempo deberíamos ir profundizando en conocerlo para amarlo e imitarlo; pero muchas veces estamos distraídos, nos distraen las vacaciones, la playa, el tiempo de ocio; y nos olvidamos de escuchar al Maestro.
Eso mismo les pasó a los discípulos. Jesús en repetidas ocasiones anunció su pasión, les advirtió que sería condenado, que moriría, pero que al tercer día resucitaría de entre los muertos. Pero los discípulos estaban distraídos, atendiendo a la multitud, buscando el reconocimiento por parte de la gente, distraídos por su vanidad.
Que no nos pase lo mismo. No dejemos que las distracciones del mundo nos aparten de este momento de reflexión y recogimiento. Dediquemos tiempo de calidad para la intimidad con Dios. Dejemos que ilumine nuestros corazones con la luz de su gracia para poder vivir sinceramente la Semana Santa.
Hoy el Evangelio nos invita a tener los oídos abiertos para saber escuchar al Señor, en todo momento: en el amigo que nos pide un consejo, en el enfermo que necesita compañía, en nuestra familia que nos pide ser más comprensivos y colaborativos. Estemos atentos para escucharlo y prestos para vivir en el servicio y la entrega como Jesús lo hizo por nosotros.
Dialoga:
Señor, ayúdame a vivir este tiempo de cuaresma con una verdadera actitud de recogimiento, para dejar de lado las distracciones y poder escuchar tu palabra en todo momento. Dame la gracia de saber imitarte y tener una vida al servicio de mis hermanos.
Concéntrate:
Repite varias veces durante el día: «Señor, que esté atento a tu voz»
Recalculando:
Para el día de hoy te invitamos a que prestes atención a todas las cosas que llaman tu atención y de ellas, tal vez tendrás algunas superfluas y otras necesarias. Entonces, el tiempo que dedicas a cosas menos importantes, te invitamos a que lo dediques a servir a alguien que lo necesita, tal vez alguna persona que hoy no pudo ir al trabajo, o estuvo delicada de salud, o tiene un familiar enfermo. Apoyar con tu tiempo y tu dedicación para hacer creíble el evangelio.
Texto del Evangelio de hoy: San Mateo 20:17-28
Mientras Jesús iba hacia Jerusalén, en el camino reunió a sus doce discípulos y les dijo:
«Como pueden ver, ahora vamos a Jerusalén. Y a mí, el Hijo del hombre, me entregarán a los sacerdotes principales y a los maestros de la Ley. Ellos dirán que debo morir, y me entregarán a mis enemigos para que se burlen de mí, y para que me golpeen y me hagan morir en una cruz. Pero después de tres días, resucitaré.»
La madre de Santiago y Juan, que eran dos de los discípulos, fue con ellos a hablar con Jesús. Cuando llegaron, ella se arrodilló delante de Jesús para pedirle un favor. Jesús le preguntó:
—¿Qué es lo que quieres?
Ella le dijo:
—Por favor, ordena que, cuando estés sentado en el trono de tu reino, mis hijos se sienten siempre junto a ti, uno a tu derecha y otro a tu izquierda.
Jesús respondió:
—Ustedes no saben lo que piden. ¿Están dispuestos a sufrir todo lo malo que va a pasarme?
Ellos le dijeron:
—Sí, lo estamos.
Jesús les dijo:
—Les aseguro que ustedes sufrirán mucho, igual que yo. Pero sólo mi Padre decide quiénes serán los más importantes en mi reino. Eso no lo decido yo.
Cuando los otros diez discípulos se dieron cuenta de todo esto, se enojaron con Santiago y Juan. Entonces Jesús los llamó a todos y les dijo:
«Ustedes saben que los que gobiernan a los pueblos se portan como sus amos, y que los grandes señores imponen su autoridad sobre esa gente. Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, si alguno de ustedes quiere ser importante, tendrá que servir a los demás. Si alguno quiere ser el primero, deberá ser el esclavo de todos. Yo, el Hijo del hombre, lo hago así. No vine a este mundo para que me sirvan, sino para servir a los demás. Vine para dar mi vida por la salvación de muchos.»
Texto bíblico: Traducción en lenguaje actual ® © Sociedades Bíblicas Unidas, 2002, 2004.