La Palabra de Dios que guía: promesa
15 de junio
Introducción
Salmos 78:52–72: la lectura para hoy comienza cuando Dios guía al pueblo fuera de Egipto y los lleva a «su tierra santa». Pero el pueblo sigue rebelándose contra Dios, y se describe la ira de Dios hacia el pueblo. El salmo concluye con la misericordia de Dios al establecer el monte Sión y elegir a David como rey de Israel.
Versículo bíblico para hoy: Salmos 78:52
Sacó a Israel como a un rebaño de ovejas; llevó a su pueblo a través del desierto.
Lectura
52 Sacó a Israel como a un rebaño de ovejas;
llevó a su pueblo a través del desierto.
53 Los llevó con paso seguro
para que no tuvieran miedo,
pero a sus enemigos el mar los cubrió.
54 Dios trajo a su pueblo a su tierra santa,
¡a las montañas que él mismo conquistó!
55 Quitó a los paganos de la vista de Israel;
repartió la tierra en lotes entre sus tribus,
y las hizo vivir en sus campamentos.
56 Pero ellos pusieron a prueba al Dios altísimo
rebelándose contra él
y desobedeciendo sus mandatos;
57 pues, lo mismo que sus padres,
lo abandonaron y le fueron infieles;
¡se torcieron igual que un arco falso!
58 Lo hicieron enojar con sus altares paganos;
adorando ídolos, lo provocaron a celos.
59 Dios se enojó al ver esto,
y rechazó por completo a Israel,
60 y abandonó el santuario de Siló,
que era su casa entre los hombres.
61 Permitió que sus enemigos capturaran
el símbolo de su gloria y su poder.
62 Tan furioso estaba contra su pueblo,
que los entregó a la espada del enemigo.
63 Los muchachos murieron quemados;
¡no hubo canción de bodas para las novias!
64 Los sacerdotes murieron a filo de espada,
y sus viudas no los lloraron.
65 Pero despertó el Señor, como de un sueño,
como guerrero que vuelve en sí del vino,
66 y derrotó a sus enemigos, y los hizo huir;
¡los cubrió de vergüenza para siempre!
67 Rechazó además a la casa de José,
y no escogió a la tribu de Efraín;
68 eligió en cambio a la tribu de Judá
y a su amado monte Sión.
69 Construyó un santuario, alto como el cielo,
y lo afirmó para siempre, como a la tierra.
70 Escogió a su siervo David,
el que era pastor de ovejas;
71 lo quitó de andar tras los rebaños,
para que cuidara a su pueblo,
para que fuera pastor de Israel.
72 Y David cuidó del pueblo de Dios;
los cuidó y los dirigió
con mano hábil y corazón sincero.
Reflexiona
Según los versículos 52–55, ¿cómo cuidaba Dios al pueblo? ¿De qué manera enojó el pueblo al Señor (versículos 58–64)? ¿Cómo se describe a David (versículos 70–72)? En base a la lectura de este salmo durante los últimos cuatro días, ¿qué aprendiste sobre Dios?
Ora
Señor Dios, tú eres nuestro pastor, cuidándonos y guiándonos día a día. Con alabanza y agradecimiento, te adoro y busco hacer tu voluntad. Oro en tu santo nombre. Amén.
Lectura para mañana
Isaías 30:8–18: el Señor insta a su pueblo que vuelva a él.