La Palabra de Dios que guía: discipulado

Introducción

Salmos 72: Este salmo es una oración de intercesión por el rey, con peticiones por el juicio justo del rey, una larga vida y un dominio mundial caracterizado por la justicia. A menudo, este salmo se lee en la fiesta de la Epifanía (que es hoy) en relación con Mateo 2:1–12, que describe la visita de los sabios del Oriente que rinden homenaje a Jesús, el recién nacido rey. Presta atención a los versículos 10 y 11 en la lectura para hoy.  

Lectura para hoy

Concede, oh Dios, al rey,
tu propia justicia y rectitud,
para que con rectitud y justicia
gobierne a tu pueblo y a tus pobres.
Ofrezcan las montañas y los cerros
paz y rectitud al pueblo.
¡Que haga justicia el rey a los pobres!
¡Que salve a los hijos de los necesitados
y aplaste a los explotadores!

¡Que tenga el rey temor de ti por siempre,
mientras el sol y la luna existan!
¡Que sea como la lluvia y el rocío
que riegan la tierra y los pastos!
¡Que abunden la paz y la rectitud
en los días de su reinado,
hasta que la luna deje de existir!
¡Que domine de mar a mar,
del río Éufrates al último rincón del mundo!
¡Que sus enemigos, que habitan en el desierto,
se rindan humillados ante él!
10 ¡Que le traigan regalos y tributos
los reyes de Tarsis y de las islas,
los reyes de Sabá y de Sebá!
11 ¡Que todos los reyes se arrodillen ante él!
¡Que todas las naciones le sirvan!
12 Pues él salvará al pobre que suplica
y al necesitado que no tiene quien lo ayude.
13 Tendrá compasión de los humildes
y salvará la vida a los pobres.
14 Los salvará de la opresión y la violencia,
pues sus vidas le son de gran valor.

15 ¡Viva el rey!
¡Que le den el oro de Sabá!
¡Que siempre se pida a Dios por él!
¡Que sea siempre bendecido!
16 ¡Que haya mucho trigo en el país
y que abunde en la cumbre de los montes!
¡Que brote el grano como el Líbano
y que haya tantas espigas como hierba en el campo!
17 ¡Que el nombre del rey permanezca siempre;
que su fama dure tanto como el sol!
¡Que todas las naciones del mundo
reciban bendiciones por medio de él!
¡Que todas las naciones lo llamen feliz!

18 Bendito sea Dios, Señor y Dios de Israel,
el único que hace grandes cosas;
19 bendito sea por siempre su glorioso nombre.
¡Que toda la tierra se llene de su gloria!
¡Amén!

20 Aquí terminan las oraciones de David, el hijo de Jesé.

Versículo clave de hoy: Salmos 72:1 

Concede, oh Dios, al rey, tu propia justicia y rectitud. 

Reflexiona

Las peticiones en este salmo casi parecen una descripción del trabajo de un rey. ¿Qué versículos indican cómo debería gobernar un rey? ¿Qué peticiones crees que son relevantes para los líderes hoy en día? ¿Cuáles de estas peticiones resuenan más contigo? ¿Por qué?   

Ora

Dios justo y amoroso, alabaré tu glorioso nombre por siempre y te adoraré solo a ti. Que todas las naciones busquen tu bendición, que tu justicia florezca en toda la tierra y que tu gloria llene todo el mundo. Amén. 

Lectura para mañana

Colosenses 3:5–17: El apóstol Pablo describe la vida vieja y la nueva.